Los juegos de rol, al igual que muchos otros juegos interactivos, por lo general tratan de evitar ser sexistas, inclusive si para ello han de romper el rigor histórico: el motivo es tratar de mostrar un mundo en el que las mujeres y los hombres tengan las mismas oportunidades.
Y hoy toca hablar de ello. ¿Por qué? Pues porque los señores responsables del Warface nos han dejado una perlita más el en camino de la mujer-objeto que no necesita taparse para protegerse de los impactos del enemigo. Y es que aunque las chicas de ficción tengan las mismas oportunidades que los chicos, en determinados detalles todavía se ve un fuerte componente sexista.
¿Qué es incorrecto en estas capturas de pantalla? Pues está claro: la chica no necesita tantas protecciones. (Ironía)
¿Tal vez sea porque así tiene más oportunidades hecha prisionera por el enemigo para ser violada que de ser matada en el campo de batalla?
En serio: cuando penséis en vestir a una chica para el combate, tratad de evitar ponerle una pezonera de placas o tacones, porque no es para nada realista ¡por hermosa que quede la chica!
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El Tera online, un ejemplo a no seguir (pese a que algunas armaduras asmodianas de varón también van por este camino) |
Antes de seguir despotricando, dejo un vídeo de
College Humor al respecto:
Bien: una vez visto esto... ¿cómo deben ser las armaduras de las chicas? Pues... ¡como la de los chicos! Adaptada a la figura del cuerpo pero enfocada a proteger, que no a enseñar como la que muestro a continuación:
Hasta aquí todo bien. El caso es que el señor Joshua Howard del equipo de Warface ha declarado que los jugadores se sienten cómodos con personajes masculinos de aspecto muy realista, pero que hay demanda de aspecto femenino debido a "
pequeñas diferencias culturales que deben ajustarse", añadiendo broches como que "
se posicionan para introducir personajes femeninos en los juegos teniendo en cuenta que deben ser de interés para un público mayormente masculino" ... digo yo que olvidando que se trata de una simulación bélica y no de un pase de modelos.
De veredicto inaceptable, podéis leer la entrevista en
Cultural Relativism, aunque otros medios se han hecho eco.